- Valoración de Alternativa Republicana sobre las Marchas de la Dignidad 22M.
Ya han pasado unos días desde que las calles de Madrid se vieran
inundadas el 22 de marzo por cientos de miles de personas reclamando
pan, vivienda, trabajo, en una palabra:Dignidad.
Gentes de toda condición social, procedentes de todos los rincones de
España reunidas bajo un anhelo: Conseguir que el gobierno cumpliera con
su obligación de defender a los ciudadanos y dejara de defender a los
mercados, a la banca, al capital neoliberal siempre insaciable y ávido
de reducir a la mínima expresión los derechos sociales y los servicios
públicos.
Los grandes medios de comunicación del régimen han manipulado la
información de la protesta destacando las acciones violentas de unos
pocos, siempre reprobable, que en nada tienen que ver con la inmensa
mayoría de los allí reunidos.
Violencia injustificada por un lado y desmedida por otro, la de
aquellos que deberían de haber protegido, como es su obligación, a los
ciudadanos que estaban ejerciendo su derecho constitucional de
manifestarse pacíficamente. Sin embargo, los cuerpos represivos
dirigidos por el gobierno se dedicaron a obstaculizar la llegada de
manifestantes a Madrid y a causar escenas de pánico cuando actuaron con
violencia desatada sin que el acto final de la protesta hubiese
finalizado.
¿Pero ahora qué? ¿Qué futuro tiene ese capital humano, con esa voluntad unitaria del pueblo exigiendo Dignidad?
Es absolutamente necesario articular políticamente las consecuencias
de la Marcha de la Dignidad. No es de recibo crear una esperanza para, a
continuación, devolverla a la orfandad y la desesperanza de la
realidad del día a día.
Se lanzó un comunicado, se pidieron adhesiones, se recabaron apoyos y
se invitó a todo un pueblo a salir a la calle exigiendo Dignidad. Los
ciudadanos han reaccionado de forma contundente y esperan respuestas y
continuidad
Ahora estamos en el después;, indudablemente la Marcha fue un éxito
de participantes, pero si sólo fue eso, una manifestación más, nos
habrán engañado y se dilapidará una energía social muy considerable.
Como expusimos en nuestro manifiesto de apoyo,
entendemos que la respuesta ha de tener un encaje político en términos
de ruptura con el actual régimen monárquico postfranquista hacia una República.
Miles de ciudadanos nos exigen un acuerdo al más amplio nivel
político y social que nos lleve a un verdadero proceso constituyente.
Estamos obligados.
Alternativa Republicana
No hay comentarios:
Publicar un comentario